Todos los artistas tienen sus propios mundos que presentan al público de forma única, personal y diferente. A pesar de proceder de distintas geografías o haber crecido en entornos diferentes, todos comparten el mismo periodo de la historia y presentan su punto de vista, sentimientos o ideas de este tiempo presente que más tarde se convierte en historia. En este espacio, quería centrarme en la naturaleza transitoria del espacio físico -una habitación de hotel- y la permanencia de las ideas, los recuerdos y las prácticas creativas que a menudo revelan historias y relatos personales únicos.
Como esta habitación de hotel, todos sus huéspedes son temporales, las estancias son temporales, sin embargo la experiencia humana y la memoria son eternas.




