A Monster in my garden
En los libros y cuentos de hadas los monstruos simbolizan lo extraño y lo diferente, lo que se aparta de la normalidad. La idea del extraño como monstruo, como peligroso, es muy antigua y la encontramos en multitud de culturas y civilizaciones. Lo peculiar es que lo que es un monstruo para alguien no es necesariamente monstruoso también para los demás. Por ejemplo, lo que se considera una desviación para los humanos puede ser algo normal para algún otro animal, algo que es ajeno a una cultura o a un grupo social, y que llega a ser aterrador por falta de intimidad o comprensión, no es necesariamente monstruoso aunque se juzgue como tal.
Como vivimos en una época en la que las distancias son más cortas que nunca, no solo porque podemos viajar rápido sino porque a través de internet vemos lo que pasa en la azotea de la casa de alguien en la otra punta del mundo. Cuando por diversas razones grandes grupos de personas se ven obligadas a emigrar y las culturas se fusionan, observamos un aumento de la xenofobia.
Los artistas, como exponentes del Zeitgeist, pueden y quizás deben trabajar contra la xenofobia. El arte siempre explora lo diferente y crea las condiciones que hacen que lo extranjero sea familiar, que lo diferente sea accesible. El monstruo es digno de amor.
O al menos nos hace reflexionar sobre quiénes y por qué son considerados monstruos.
Artistas:
Grigoria Vryttia
Mima Razelou
Voula Ferentinou
Ioanna Bouzika
Vasiliki Pantazi
Grigoris Papagrigoriou